Ecuador se ha trazado la meta de alcanzar una cobertura de agua potable y saneamiento del 95% para 2017 para lo cual adelanta programas que cuentan con una inversión de US$ 855,7 millones, financiados por CAF -bando de desarrollo de América Latina- y por el Estado ecuatoriano, a través del el Banco del Estado (BdE) el organismo ejecutor a lo largo del territorio nacional. Los proyectos no sólo han recibido recursos para la infraestructura, sino para que funcionen con un modelo sostenible. Se han financiado por ejemplo, estudios de diseño definitivo, fiscalización para la ejecución de obras y estudios, y se han previsto montos para inversiones en fortalecimiento institucional. Ya se han cumplido las dos primeras fases, Promadec I y Promadec II, que han contado con US$ 500 millones con los que se concretaron 455 proyectos en agua potable y saneamiento, alcantarillado sanitario, recolección y disposición de residuos sólidos que mejoran las condiciones de vida de 3,5 millones de habitantes en todo el país sudamericano. La tercera fase, Promadec III, cuenta con un contrato por US$ 275 millones de la CAF, que busca un mejoramiento en las condiciones de salubridad y de productividad en zonas rurales y urbanas del país.
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