“Si puta es ser libre y dueña de mi cuerpo soy puta… y qué?”, se lee en cuatro pancartas gigantes emplazadas en sitios de gran tránsito de Quito. Se trata de una campaña contra el feminicidio que adelanta la concejala ecuatoriana Carla Cevallos. La polémica frase, que ha provocado un encendido debate público, aparece impresa en varios autobuses del transporte público, junto a una cruz de color rosa, la silueta de un rostro femenino y las palabras: “NO MAS”. El anuncio viene acompañado de las direcciones de Facebook y Twitter de la concejala Cevallos, junto al hashtag #nomascrucesrosadas. Seis de cada diez mujeres han sido víctimas de algún tipo de violencia de género en el país, según datos oficiales a 2011 del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC). La campaña contra el feminicidio impulsada por Cevallos, de la Alianza SUMA – VIVE, ha incluido colocación de cruces rosadas en el parque La Carolina, el más visitado de Quito, y en el volcán Pichincha. Una de cada cuatro mujeres en Ecuador ha vivido violencia sexual, según el INEC. Entre enero y diciembre del 2013 se registraron 336 homicidios por violencia de género, de acuerdo con la Comisión de Estadística de Violencia de la Fiscalía General del Estado.
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