Al reiterar que la comunidad científica llegó al convencimiento de que el calentamiento global es una amenaza que ha llegado a tocar la puerta de millones de seres en el planeta, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció una serie de órdenes ejecutivas para reducir la emisión de dióxido de carbono en un 30% hacia el 2030. El gobernante insistió en la necesidad de seguir apostando por energías limpias para liberar a la economía de una dependencia maligna y aliviar la creciente carga en el sector salud por problemas relacionados con enfermedades respiratorias como el asma o por contaminación. El calentamiento global, traducido en forma de tornados, huracanes e inundaciones causa más de 100 millones de dólares en pérdidas al año en Estados Unidos. Voceros del Partido Republicano no escatimaron ataques contra un plan que, desde su punto de vista, traerá pérdidas para la economía por 51.000 millones de dólares al año.
Lea la noticia completa en El Universal (MX)