Un equipo de la ciudad colombiana de Pereira se prepara para representar por primera vez al país suramericano en la tercera edición de la Carrera Solar Atacama, una travesía de cinco días a lo largo de 1.400 kilómetros en el desierto chileno, con un vehículo solar de fabricación propia.
El grupo, integrado por alumnos y maestros del Semillero en Energías Renovables de la Universidad Tecnológica de Pereira, así como aprendices e instructores del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), trabaja desde hace seis meses en “XUE: Dios de los Chibchas”, un auto que combina energía solar y propulsión humana a partir de pedales.
“Vamos proyectados a ganar, a ser campeones, a innovar y a mostrar el talento colombiano”, dijo a Colombia.inn, agencia operada por Efe, Andrés Felipe Gómez, líder del semillero y piloto del carro.
El trasfondo de la construcción del vehículo solar, que costó cerca de unos 8.000 dólares (15 millones de pesos), es el de “mitigar y mejorar el transporte en Colombia”.
La escudería colombiana ha costeado con el patrocinio de cuatro empresas nacionales los 200 millones de pesos (unos 106.000 dólares) que se han requerido para ultimar los detalles de la participación en la competencia chilena, a la que espera llegar con un equipo de entre 18 y 20 personas.
Como preparación para la carrera, los estudiantes corrieron la semana pasada en el autódromo de Tocancipá un vehículo de prueba, que con un motor de 1.200 vatios alcanzó una velocidad máxima de 35 kilómetros por hora.
“La velocidad estándar de la competición es de 30 kilómetros por hora y el récord está en 45. Creemos que si logramos hacer un muy buen trabajo con el chasis y el diseño final, podríamos alcanzar los 50 o 55 kilómetros por hora”, indicó Gómez.
El vehículo que competirá en Chile usará baterías de litio que tienen una duración mínima de cinco horas y un sistema de recarga constante a través de los paneles solares.
La carga del vehículo es automática y tarda entre una hora y una hora media, dependiendo de la radiación que reciban los paneles.
Las piezas usadas en la construcción de “XUE” son colombianas, con excepción del motor, de origen estadounidense, aclaró Gómez.
El piloto del automóvil colombiano cumple una rutina de ejercicios en bicicleta y se prepara para soportar temperaturas mínimas de 30 grados Celsius y un recorrido dividido en cuatro etapas de unos 300 kilómetros cada una.
“Uno tiene que empezar a congeniar con el vehículo solar y aprovechar las rectas prolongadas para hacer una combinación entre pedal y aceleración”, explicó.
En la Carrera Solar Atacama participan 26 escuderías de Chile, Venezuela, Ecuador, Brasil, Bolivia, Colombia y México, además de invitados especiales de Francia y Japón.
La competición tiene dos categorías: Evolución, en la que participan vehículos 100 % solares, e Híbridos, que permite recargas fotovoltaicas y propulsión humana.
COLOMBIA.INN | @IQLatino
Imagen: COLOMBIA.INN/JUAN MANUEL BARRERO