Aunque para algunas corporaciones de alimentos los temas de la obesidad infantil y su responsabilidad social le son totalmente ajenos, otras han tomado nota y comienzan a actuar en consecuencia con la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para que el azúcar constituya menos del 10% de la dieta diaria de un niño, con un tope de 50 gramos.
Grandes fabricantes de gaseosas, chocolates, lácteos y golosinas, como Coca-Cola, Nestlé y Danone están desarrollando una línea de productos bajos en azúcar, sobre todo porque las tres marcas están en la mira de las autoridades del área de salud de muchos países.
Coca-Cola ha diseñado una estrategia de diversificación de su portafolio de productos y en la actualidad 45% de su portafolio de productos en la Argentina es baja o sin calorías. La empresa ya lanzó su programa Masterbrand, por el cual todas las latas y botellas de Coca-Cola Light, Zero y Life fueron rediseñadas priorizando el color rojo, con el objetivo de “recocalizar” a sus productos sin calorías. La campaña ya llegó a Chile y España, y la Argentina será uno de los próximos mercados.
Nestlé focaliza su estrategia en lo que define como consumo responsable. A la reducción del contenido graso y de azúcar en sus chocolates complementa con una campaña de educación al consumidor sobre cuáles son las porciones y consumos diarios de chocolate.
En Danone también son conscientes de las nuevas responsabilidades que deben asumir a partir del cambio de paradigma en el consumo de azúcar e incluso desde la misión de la compañía, que cuenta con un departamento de nutrición y salud. En la Argentina esta marca fue pionera en desarrollar la categoría de aguas saborizadas, que crecieron quitándoles clientes a las gaseosas y hoy un cuarto de su portafolio corresponde a bebidas cero calorías”.
Fuente: Artículo publicado originalmente en La Nación (AR) | versión IQLatino
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