Nueve zonas arqueológicas de México consideradas como Patrimonio Cultural de la Humanidad, quedaron inscritas en el Registro Internacional de Bienes Culturales Bajo Protección Especial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). Esta inscripción otorga a partir de ahora una inmunidad especial a estos sitios, para ser protegidos en casos de conflictos armados o riesgos a los que estarían expuestos por desastres naturales o peligros antropogénicos. Uno de las zonas arqueológicas protegidas es Monte Albán, en Oaxaca. Esta ciudad prehispánica floreció de los años 700 antes de Cristo, hasta inicios del siglo IX después de Cristo. Toda la historia acumulada en sus edificios y la fusión de dos culturas que ocuparon este lugar: la zapoteca primero y la mixteca después, es lo que hace merecedora a Monte Albán, primero para ser considerada patrimonio mundial en 1987 y ahora, para gozar del Escudo Azul a partir de este 2015.
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