Tal vez lo ignore o nunca se lo ha planteado, pero buena parte de la vestimenta que solemos llevar viola derechos humanos. Así se desprende de un estudio elaborado por la española Coordinadora Estatal de Comercio Justo (CECJ), a propósito de haberse celebrado el pasado sábado 9 de mayo el Día Internacional del Comercio Justo.
De acuerdo con la CECJ, el 80% de las personas que fabrican nuestra vestimenta son mujeres, con frecuencia sometidas a jornadas de hasta 14 horas diarias, salarios míseros y condiciones laborales peligrosas.
En España, por ejemplo, cada persona gasta al año US$ 490 (437 euros) en ropa, buena parte de ella fabricada por “mujeres asiáticas, jóvenes, que trabajan entre 12 y 14 horas diarias”.
Hace dos años, cuando ocurrió la tragedia del Rana Plaza, en Bangladesh, donde fallecieron 1.138 personas y más de 1.500 resultaron heridas, algunas empresas comenzaron a tomar conciencia del problema. Pero, con el tiempo, la tragedia parece haberse olvidado.
Si bien tras lo ocurrido el sueldo mínimo se incrementó un 77%, en la actualidad solo llega a US$ 56 (50 euros) mensuales, una cantidad insuficiente para cubrir las necesidades básicas.
Todos los ciudadanos deberíamos conocer el origen de la vestimenta que adquirimos, revisar la información que contienen y conocer dónde se ha fabricado y qué materiales se han utilizado en su elaboración.
Fuente: Artículo publicado originalmente en Eroski Consumer | versión IQLatino
Imagen: tuverde.com