Este mes el Vaticano discutirá la posibilidad de ordenar sacerdotes no célibes, casados y con hijos. Pero solo en las zonas remotas y extensas como la Amazonia, donde los sacerdotes escasean y ya no hay misa diaria.
El llamado Sínodo de la Amazonia se congregará este mes en Roma convocado por el Papa Francisco. Obispos de la región y expertos no solo debatirán con él la futurible ordenación de curas casados, sino también la de mujeres como diáconas, como recuerda El País de España.
Los sacerdotes han de ser preferiblemente ancianos, indígenas de la zona y con familias estables, según la corresponsal de la Santa Sede en La Vanguardia, Anna Buj.
El Vaticano publicó en junio pasado el documento preparatorio de esta reunión. Buj escribe que la convocatoria del Sínodo de la Amazonia aparece como “una medida de emergencia para luchar contra la falta de sacerdotes en los lugares menos poblados de la región”. Sería también una medida pionera.
“Las comunidades católicas tienen dificultades para acudir a misa por la falta de sacerdotes. Como sólo los curas pueden oficiarla, cerca del 70% de los católicos en este lugar no tienen acceso a la misa semanal”, añade Buj.
El documento se titula Amazonia: nuevos caminos para la Iglesia y por una ecología integral –en el Sínodo también se discutirán propuestas para proteger la selva y a sus moradores, después de los incendios recientes–. El papel deja abierto que se “estudie la posibilidad de la ordenación sacerdotal para personas ancianas, preferentemente indígenas, respetadas y aceptadas por su comunidad, aunque tengan ya una familia constituida y estable, con la finalidad de asegurar los Sacramentos que acompañen y sostengan la vida cristiana”, escribió Daniel Verdú desde Roma para El País.
La Amazonia tiene una extensión de entre 6 millones a 8,1 millones de kilómetros cuadrados (las fuentes no coindicen en las cifras), que abarca nueve países: Brasil, Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Guyana, Surinam y Guyana Francesa.
Un gráfico, en una nota de El País del 29 de septiembre, firmada por Naiara Galarraga Gortázar desde Manaos, muestra que solo 37 millones de personas habitan esa región. La mayoría de esa población, agrega un despacho de BBC Mundo, es católica.
La información de El País tiene como fuente la Red Eclesial Panamazónica e indica que en la zona hay 2166 parroquias, 3828 sacerdotes, 418 diáconos permanentes casados y 100 obispos.
Los diáconos permanentes pueden realizar algunos ritos, pero no escuchar confesión, ni dar la eucaristía ni la extremaunción. Las religiones protestantes, en cambio, recuerda BBC Mundo, no tienen estas restricciones. “Eso puede ayudar a explicar el rápido crecimiento de las iglesias evangélicas en la Amazonía brasileña. Según datos del censo, los evangélicos pasaron del 19,8% al 30% de la población entre 2000 y 2010”.
La misma nota de BBC Mundo cita un estudio de la Universidad de Georgetown que dice que, mientras la cifra de católicos en el mundo se ha duplicado desde 1970 a 1300 millones personas, el número de sacerdotes sigue estancada desde entonces, alrededor de 400 mil.
Galarraga Gortázar entrevistó al obispo de São Gabriel da Cachoeira, Edson Damián, sobre las reuniones preparatorias de Manaos antes del Sínodo. El documentos que lo convoca es el trabajo de asambleas en las que han participado 87000 personas de los nueve países amazónicos. “Son esos líderes que están al frente de comunidades aisladas, que celebran hace mucho tiempo la palabra, que transmiten la catequesis… Queremos que con la formación debida puedan ser ordenados padres y que la eucaristía esté presente en vez de negarla como ahora”, dijo el obispo.
“Necesitamos dejar de ser una iglesia visitante para convertirnos en una que esté más presente en las comunidades”, dijo, por su parte, el Roque Paloschi, el arzobispo de Porto Velho, a BBC Mundo. En esa diócesis hay 47 sacerdotes para 950 mil habitantes.
Damián le dijo a Galarraga Gortázar que espera que el obispo que lo sustituya en la diócesis de São Gabriel da Cachoeira sea indígena. “Es lo que corresponde, dice, porque es una de las que tiene más proporción de fieles nativos”.
Gerardo Trinidade, ordenado hace un año como cura, tiene a su cargo 17 comunidades donde hay una mayoría evangélica. “Solo las visito cuatro veces al año y son visitas con muchas prisas”, le dijo.
En la iglesia católica el celibato clerical no fue siempre ley. Se instauró en el siglo XII, pero no existió en la fundación del catolicismo y durante siglos hasta entonces.
Si se aprueba esta medida en el Sínodo de la Amazonia, terminaría el monopolio del celibato y se abrirían las puertas a cambios similares en otras regiones, como las islas del Pacífico, escriben las periodistas de El País y La Vanguardia.