Alexandra Castillo y Dunia Araya, de 29 y 24 años, se casaron pasados ocho minutos de la medianoche del 26 de mayo en Costa Rica. La ceremonia civil se transmitió en vivo en internet. Estrenaron así a ese país como el primero de Centroamérica en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Diez días antes se anunciaba que Costa Rica entraba también en la OCDE, el club de los 37 países “de mayor desarrollo en el mundo”.
La notaria pública Ana Cecilia Castro casó a Castillo y a Araya llevando con tapabocas. “Las declaro a ustedes, las contrayentes, unidas en el vínculo matrimonial, esposa y esposa”. A la ceremonia, que celebraron al aire libre, con el fondo de los sonidos nocturnos de la naturaleza, asistieron en persona miembros del círculo más íntimo de la pareja, siguiendo las restricciones impuestas en la pandemia. Hubo ritual de “sí, acepto” e intercambio de anillos.
La entrada en vigencia del matrimonio igualitario en Costa Rica supone un avance para ese país y la pone por delante en una región, Centroamérica, donde la comunidad LGTBI está perseguida, como apunta un reporte de la Deustche Welle.
“América Central es una de las regiones más peligrosas de Latinoamérica para el colectivo LGBTI. Los asesinatos homófobos o tránsfobos, por desgracia, distan de ser anecdóticos en países como Honduras, El Salvador o Guatemala. Y la huida de los refugiados LGBTI hacia países seguros donde empezar de nuevo no es precisamente un camino de rosas”, dice el artículo.
En enero de 2018, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ordenó al Estado de Costa Rica garantizar los mismos derechos para las personas de identidad de género diversa. Ello incluía el matrimonio y el cambio de nombre según el género con el que se identifique su portador. “Reconocer y garantizar todos los derechos que se deriven de un vínculo familiar entre personas del mismo sexo”, decía la sentencia, como informa BBC Mundo.
Desde 2010 y hasta enero de 2018, una serie de fallos judiciales en Costa Rica relacionados con documentos de identidad para personas sexodiversas, reconocimientos de uniones de hecho entre parejas homosexuales y la garantía de derechos económicos para ellas habían abierto el camino para la legalización del matrimonio igualitario en ese país que entró en vigencia el 26 de mayo, apunta La Nación de Costa Rica.
En agosto de 2018, un tribunal constitucional de ese país declaró la inconstitucionalidad del inciso 6 del artículo 14 del Código de Familia que prohibía el matrimonio entre personas del mismo sexo. Esa decisión, avaló las uniones de hecho entre ellas. En octubre de 2019, el Consejo General del Poder Judicial reconoció también el derecho a heredar de parejas del mismo sexo de funcionarios.
El gobierno de Luis Guillermo Solís había solicitado la opinión de la CIDH en 2016.
Como informa BBC Mundo, la sentencia de 2018 de esta corte estaba también dirigida, como una recomendación, a los países firmantes de la Convención Americana de Derechos Humanos. Hasta ahora los países latinoamericanos que permiten el matrimonio igualitario y uniones civiles entre personas del mismo sexo son Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Uruguay y algunos estados de México.
Víctor Monge, activista en Costa Rica de los derechos LGBTI costarricense y cofundador de la organización Movimiento Diversidad, le dijo a la Deustche Welle que cree que los próximos a legalizar el matrimonio humanitario en Centroamérica serán Panamá y Belize, y que, además, pronto “muchas parejas latinoamericanas del mismo sexo podrían encontrar en Costa Rica un lugar donde vivir su amor al amparo de la ley”.
El actual presidente de ese país, Carlos Alvarado Quesada, ganó las elecciones justo en 2018. El reporte de DW recuerda que se impuso al pastor evangélico Fabricio Alvarado y que los parlamentarios de su línea ideológica intentaron, sin éxito, estrategias para retrasar la entrada en vigencia de la legalización del matrimonio igualitario. La Sala Constitucional de Costa Rica había dado un plazo de 18 meses al Congreso para que legislara sobre el matrimonio civil entre personas del mismo sexo o, de lo contrario, quedaban automáticamente derogados los artículos en las leyes que lo prohibían, recuerda El Confidencial. Eso es lo que ocurrió a partir del 26 de mayo.
“Las parejas del mismo sexo han esperado por muchísimas décadas el reconocimiento de sus derechos en igualdad de condiciones”, le dijo a AFP el comisionado presidencial para la población LBGTI, Luis Salazar.
Y Gia Miranda, directora ejecutiva de la campaña y plataforma Sí Acepto Costa Rica, agregó: “Un cambio legal no implica que haya un cambio social, pero sí es un avance enorme, un hito maravilloso en la historia de Costa Rica”.
Sí Acepto Costarrica publicó, precisamente, en su página de Facebook las fotos de otra boda civil entre dos mujeres que se celebró el 26 de mayo, a las 2 de la tarde: las de Berliotte Barrientos y Guisell Matus.
Foto: captura de pantalla de la transmisión en vivo de Teletica.com