Latinos, censo y redistribución

Los datos del Censo de 2020 documentan el aumento de la diversidad racial y étnica en Estados Unidos, destacando un importante crecimiento en la comunidad latina. Lo que a su vez reafirma la importancia de esa misma equidad en el proceso de redistribución de distritos electorales que se realiza una vez por década

Los datos del Censo de 2020 documentan el aumento de la diversidad racial y étnica en Estados Unidos, destacando un importante crecimiento en la comunidad latina. Lo que a su vez reafirma la importancia de esa misma equidad en el proceso de redistribución de distritos electorales que se realiza una vez por década.

Estudiosos del tema advierten sobre amenazas a un proceso justo de redistribución de distritos en algunos estados, mientras apuntalan esfuerzos para conseguir que el Congreso proteja el derecho al voto. El Centro Brennan para la Justicia advierte que, entre el 1 de enero y el 14 de julio de 2021, al menos 18 estados promulgaron 30 leyes que restringen el acceso al voto. Estas leyes dificultan el sufragio por correo y anticipado, imponen requisitos más severos para la identificación de los votantes y son proclives a la purga de votantes defectuosos. 

Esta oleada de restricciones al voto –la más agresiva que ellos han visto en más de una década de seguimiento de las leyes electorales estatales- estaría motivada en gran parte por acusaciones falsas y a menudo con contenido racista sobre presunto fraude electoral. Según la misma fuente, en las sesiones legislativas de 2021 se han presentado más de 400 proyectos de ley con disposiciones que restringen el acceso al voto en 49 estados.

El gobernador de Texas, Greg Abbott, firmó el pasado martes 7 de septiembre una ley que impone nuevas restricciones al voto, en uno de los estados de mayor crecimiento y diversidad del país. Marc Elias, abogado especializado en elecciones, dijo que el estado de Texas será demandado por su nueva ley. Paralelamente, la Ley de Derecho al Voto John L. Lewis ya salió de la Cámara de Representantes y espera su turno ante el Senado para ser votada. Mientras tanto, un nuevo proyecto de ley, denominado Ley de Libertad de Voto (Freedom to Vote Act), fue presentado por la senadora Amy Klobuchar.

La legislación se basa en un marco propuesto a principios de este año por Manchin, así como en la amplia Ley para el Pueblo o For The People Act, que fue bloqueada en junio por la bancada republicana del Senado. 

¿Quiénes somos?

El primer paso para la redistribución de distritos es entender quiénes somos los habitantes de Estados unidos al día de hoy. 

Esta información se basa en los resultado que arrojó el Censo 2020 y servirá para la próxima redistribución de distriros, así como para planificar el país de los próximos diez años. El reciente censo mostró la cara más diversa de la nación, según la percepción de Matt Hugo López, Director de Investigación Hispana en el Pew Research Center.

De acuerdo al vocero, somos 331,4 millones de habitantes y 33,8 millones de estadounidenses se identifican como multirraciales o pertenecientes a más de una raza. “Son 9 millones más que en 2010”, destaca López. 

Un dato a resaltar: la mitad de los estadounidenses multirraciales son hispanos. Los hispanos o latinos han crecido del 7% al 19% entre 2010 y 2020, hasta alcanzar 62 millones.

“El blanco no hispano ha descendido del 80% en 1980 al 58% en 2020”, dice. Y agrega que este grupo no solamente bajó en lo porcentual, sino también en números totales, al descender de 196,8 millones en 2010 a 191,7 millones en 2020. “Han llegado a su nivel porcentual más bajo de la historia”, asegura. 

López revela que la población negra se ha mantenido en un inalterable 12% a nivel porcentual; pero en esta oportunidad significan 40 millones de personas. Los asiáticos han crecido de 1% a 6%, llegando hoy a 20 millones.  Remata señalando que, geográficamente, la población de 32 estados creció; pero en esos mismos estados la población blanca no hispana descendió.  

“Prácticamente en todos los lugares del país ha habido cambios. La gente se ha desplazado hacia zonas urbanas y suburbanas. Las zonas rurales han perdido población. Lugares como San Antonio, Dallas y Houston en Texas, se han vuelto más diversos con hispanos, afroamericanos y asiáticos”, detalla. 

Explica que la mayoría del aumento poblacional hispano es por nacimiento, no por migración. “Hay declive en la migración hispana y se debe tener en cuenta que las muertes también influyen en estos cambios”. 

Según López, los matrimonios interraciales han crecido, hecho que contribuye a aumentar el grupo de gente que se define como de dos o más razas. “25% de las poblaciones hispana y asiática que se han casado han sido matrimonios mixtos”, según sus datos. 

Para él, todos se sinteron más en confianza de expresarse ante el más reciente censo porque cambió el cuestionario, se llenó en línea, y además se pueden introducir más caracteres. “La gente ahora está consciente de su identidad. También influyeron en esto los incidentes con la administración de Donald Trump y los acontecimientos posteriores a la muerte de George Floyd”, remata López. 

Redistribución pensando en la gente

“La democracia estadounidense está basada en que todas las personas reciban una representación igualitaria en la Cámara de Representantes, en sus legislaciones de estado y en gobiernos locales”, así lo afirma Yurij Rudensky, Asesor de Redistribución de Distritos en el Centro Brennan para la Justicia, perteneciente a la Facultad de Derecho de la Universidad de Nueva York. Por ello se da la redistribución de distritos. Debido a que hay un cambio en la distribución de la población, los límites de los distritos se tienen que ajustar para poder cumplir con el mencionado principio. 

El académico explica que el Censo ofrece los datos de la población y sobre estos se reajustan los distritos. “Los límites locales y estadales se volverán a trazar próximamente. Hay que reflejar estos cambios”, adelanta Rudensky. Y continúa: “Todos deben tener la misma oportunidad para elegir a sus candidatos”. Lamenta que sea en realidad “un tema muy político y partidista”. Advierte que, cuando un partido político controla este proceso puede usarlo para perjudicar a sus opositores, como es el caso del llamado gerrymandering. “Esto ocurre cuando los políticos ignoran los cambios en la población y distribuyen los distritos sin tener en cuenta a las personas”. Refiere que los últimos casos de gerrymandering tienen que ver con un partido en el poder tratando de perjudicar a sus oponentes, o con asuntos raciales. “A veces, es una combinación de ambos. Usan herramientas muy sofisticadas. Pretenden crear los mismos resultados políticos cada año sin importar los cambios que hayan ocurrido” previene. Según él, “Cuando la demografía está cambiando , es mucho más alto este ciclo de gerrymandering, Observamos que está sucediendo en Florida, Georgia, North Carolina y Texas”. 

Señala que hay gente que le tiene miedo a las comunidades diversas que están emergiendo. “Por ello intentan alejarse del principio de representación política igualitaria. Esto hace que la democracia se reduzca”. Aconseja que la redistribución de distritos debe quedar en manos de comisiones independientes, que no tengan motivaciones políticas. “Michigan, Arizona, California y Colorado serán redistribuidos por comisiones independientes”, refiere el académico. Dichas comisiones deben estar integradas por representantes de los dos partidos principales, además de independientes. “La selección de los comisionados no la deben hacer actores políticos. No pueden tener interés personal en la redistribución del circuito. Deben estar orientadas al interés público y no a producir resultados de sesgo partidista”, instruye Rudensky.

Llamando a participar

Jesselyn McCurdy, Vicepresidenta Ejecutiva Interina de Asuntos Gubernamentales en The Leadership Conference Education Fund, afirma que  “En este momento nuestra democracia está en peligro, a menos que tomemos una acción inmediata y directa para protegernos, que todas las voces y los votos cuenten”.

Ella resalta la importancia de que sea aprobada la Ley John L. Lewis. Adelanta que los comités del Congreso “han recibido cientos de horas de declaraciones de testigos sobre bloqueos a votantes negros y de color”. Y llama a que el asunto tenga un escrutinio de la Corte de Estados Unidos.

Sobre la llamada For the People Act, espera que haya noticias en el senado en septiembre. Y llama a la ciudadanía a participar y presionar. “Así como fuimos a votar en números récord en las elecciones pasadas, debemos exigir un futuro mejor”, finaliza la vocera.