Hoy, en el Día Internacional de la Mujer Médica entrevistamos a Alejandra Lordén. Ella es médica ginecóloga y obstetra argentina y además es diputada provincial en la Cámara de la provincia de Buenos Aires. Oriunda de Saladillo, una pequeña ciudad de Buenos Aires con poco más de 20 mil habitantes, ha dedicado toda su vida, desde los diferentes roles, a ayudar a los demás.
1) Alejandra, ¿cuál es para usted la importancia de este día?
– Este día realmente es muy importante. La medicina no queda ajena a la brecha de género. Históricamente, las mujeres no podíamos estudiar medicina, era una carrera solo para los hombres.
Hay muchas mujeres emblemáticas que marcaron un antes y un después en la historia de la ciencia médica, a nivel mundial Marie Curie por ejemplo y en Argentina Cecilia Grierson. Mujeres que en lo personal admiro profundamente. Por eso celebro el tener un Día donde se resalte el trabajo de la mujer en la medicina.
2) ¿Cómo conjuga su rol de Médica con su figura política?
– Las dos disciplinas se conjugan perfectamente. Ambas exigen vocación de servicio, mirada empática hacia el otro y ganas de transformar la realidad de muchísimas personas. Ser diputada provincial en mi país y ser médica, son mis dos grandes pasiones y son caminos que sin lugar a dudas volvería a elegir, porque sé que desde ambos lugares puedo hacer mucho por el otro.
3) ¿Cree que es un doble desafío ser médica y mujer?
– Como comenté anteriormente, ser mujer siempre y aún en estas épocas es un desafío cuando se une a cualquier profesión o actividad que nos saque del rol de ama de casa, madre, hija, nuera, etc. Es claro que aún hoy en el Siglo 21 no se equilibra o iguala con los hombres, ni desde los espacios, ni desde las remuneraciones. A pesar de ello, la evolución en derechos adquiridos para la mujer es muy importante pero falta muchísimo más y lo mejor de todo es que solo depende de nosotras.
4) ¿Algún mensaje para destacar a aquellas colegas que enfrentaron la pandemia?
– Todos mis colegas y claro que en este momento debo ser justa e incluir a los hombres y a los trabajadores de la Salud, no únicamente médicos, han hecho y siguen haciendo una formidable tarea, algunos en la primera línea de la trinchera y otros un poco más atrás. Pero hay algo que me duele y que es que solo han conseguido por unos meses aplausos desde los balcones.
5) En relación a América Latina, ¿Cómo ve los sistemas médicos en Latinoamérica y en especial en Argentina?
– Sinceramente me apena mucho ver que cuando se piensa en las necesidades de la sociedad, la Salud y las políticas públicas enfocadas en la mejora de los sistemas, no están nunca entre las prioridades.
El sistema de salud en mi país, Argentina, es fragmentado y desigual ,coexisten subsistemas y sistemas mixtos, obras sociales, prepagas y obras sociales sindicales además de la salud pública, se gasta mucho dinero y mal.
Creo que necesitamos ir hacia un sistema único de salud que contemple público y privado, que sea igualitario y que trabaje en prevención y promoción de la salud además de atender las enfermedades.
Debemos trabajar para lograr un cambio realmente beneficioso, donde se optimice la inversión de presupuestos destinados a Salud y que sea a largo plazo. Y considero esencial crear el debate e involucrar a toda la sociedad.
6) Por último, ¿qué mensaje daría a aquellas mujeres que quieren ser médicas?
– Les diría que gracias por elegir la profesión más hermosa. Que sepan que van a poder hacer mucho por otras personas, que si bien muchas veces es cuesta arriba, la recompensa de saberse y sentirse útil para un otro le da sentido a todo. A aquellas mujeres apasionadas y valientes, gracias.
La carrera es muy sacrificada y lleva mucha dedicación, pero todo esfuerzo es recompensado y cada minuto de ejercicio es gratificante porque sabés que estás ayudando a otra persona.