El pasado jueves, el presidente Joe Biden se reunió en la Casa Blanca con el presidente colombiano Iván Duque. Biden, tiene una larga historia con el país, incluido el trabajo para el Plan Colombia como senador y en Paz Colombia como vicepresidente de Obama, razones por las que ha llamado a Colombia una “piedra angular” de la política exterior estadounidense en la región.
Esto ha llevado a que el Senador Bob Menéndez (Presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado), y el Senador Tim Kaine (Presidente del Subcomité sobre el Hemisferio Occidental) presenten el Proyecto de Ley para la Alianza Estratégica entre Estados Unidos y Colombia de 2022. Esta iniciativa busca promover la importancia de revitalizar las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Colombia, países con más de 200 años de relaciones diplomáticas.
Colombia se ha convertido en un socio de seguridad cada vez más importante para los EE. UU. en América del Sur para combatir el narcotráfico y fortalecer la influencia estadounidense en la región.
El mencionado Proyecto de Ley para la Alianza Estratégica tiene diversas finalidades. Entre las más importantes están : Impulsar las inversiones en empresas colombianas a través de la creación de un nuevo Fondo Empresarial Colombo-Americano, y busca designar formalmente a Colombia como un Aliado Importante no-OTAN. Convirtiéndose en el país número 19 en conjunto con Afganistán, Argentina, Australia, Bahrein, Brasil, Egipto, Qatar, Israel, Japón, Jordania, Corea, Kuwait, Marruecos, Nueva Zelanda, Pakistán, Filipinas, Tailandia y Túnez.
Con estas iniciativas el gobierno americano busca ayudar a catalizar la recuperación económica de Colombia y promover nuevos esfuerzos para reducir la dependencia de Estados Unidos de las cadenas de suministro chinas. Por otro lado China también está trabajando para aumentar su influencia en Bogotá. Las empresas respaldadas por Beijing han ganado contratos para trabajar en varios proyectos de infraestructura colombianos, incluido el metro y el ferrocarril regional en Bogotá, los esfuerzos para construir infraestructura 4G y 5G y la construcción de una nueva mina de oro.
Otro de los objetivos es la restauración de la gobernabilidad democrática en la zona antes de permitir que Venezuela aumente las exportaciones de petróleo a los EE. UU. en medio de una crisis mundial de suministro provocada por la invasión rusa de Ucrania. La política de Estados Unidos con respecto a Venezuela durante la reunión en la Casa Blanca el pasado jueves entre Biden , Iván Duque es un punto fundamental. Su gobierno ha expresado su preocupación por la apertura de Estados Unidos a Caracas. Duque califica a Maduro de “criminal de guerra”.