Un tratamiento nuevo que consta de la extracción de células del sistema inmunológico llamadas linfocitos T, o células-T, para la posterior modificación genética de estas células para que ataquen al cáncer, y la reintroducción de las células al paciente por vía intravenosa, está resultando de alta efectividad en ciertos tipos de cáncer, como leucemia.
Algunos casos de leucemia tratados mediante este procedimiento en el Hospital Infantil de Seattle se acercaron al milagro: en el 90% de los pacientes, este tipo de cáncer se elimina. Las probabilidades de que remita el cáncer en estas circunstancias es normalmente inferior al 10%.
La empresa Juno Therapeutics, dedicada a terapia con Células-T, ha recaudado 304 millones de dólares al salir a bolsa en diciembre, solo 16 meses después de su constitución.
Las terapias de células-T son de las más radicales de una serie de nuevos enfoques que reclutan al sistema inmunológico para que ataque al cáncer.
Los tratamientos funcionan por medio de la eliminación de frenos moleculares que normalmente previenen que las células-T del cuerpo identifiquen al cáncer como enemigo, y han ayudado a demostrar que el sistema inmunológico es capaz de destruir al cáncer.
La tecnología de Juno para la modificación de las células-T para guiar su actividad está aún en una fase anterior, más experimental. En el momento de su OPI, Juno ofrecía datos de tan sólo 61 pacientes de leucemia o linfoma.
La medicina está entrando en una nueva fase en la que las células se convertirán en medicamentos vivos. Es el tercer pilar de la medicina. Las farmacéuticas que surgieron de la química sintética constituyen el primer pilar. Empresas como Juno esperan utilizar nuestras propias células como tratamiento. En el caso de las células-T, las prometedoras pruebas indican que algunos cánceres podrían tratarse con pocos efectos secundarios aparte de una fiebre alta.
Fuente: Artículo originalmente publicado en MIT Technology Review | versión IQ Latino
Imagen: asbtec.blogspot.com