Un estudio de los economistas Huasheng Gao y Wei Zhang reveló que las compañías localizadas en estados más respetuosos con la diversidad sexual, son más innovadoras.
“Demostramos que las ENDAs, leyes de empleo en Estados Unidos basadas en la no discriminación –leyes que prohíben la discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género– impulsan la innovación. Encontramos que hay un aumento significativo en las patentes y las citas de patentes de las compañías basadas en estados que han aprobado los ENDAs en comparación con las establecidas en los estados que no”, dice el extracto del estudio, publicado en la revista Management Science.
Richard Florida se había adelantado con otro estudio en 2001 con conclusiones parecidas: “El indicador principal del éxito de alta tecnología en áreas metropolitanas es una gran población gay. Las cinco áreas metropolitanas con la mayor concentración de residentes gays están entre las primeras 15 áreas de con más desarrollo de la alta tecnología en la nación: San Francisco, Washington DC, Austin, Atlanta y San Diego. Los gays no solo predicen la concentración de la industria de alta tecnología, sino que son indicadores que predicen sus crecimiento”.
En CityLab, traducido por CityLabLatino, escribió este mes: “La promulgación de políticas relacionadas con la inclusión de las personas LGBT permanece como un tema candente en varios lugares de Estados Unidos. Debería saberlo, yo lo he sentido en carne propia: mi conclusión de que mientras más tolerante y respetuosa de los homosexuales sea una ciudad, mayores son sus índices de innovación y de alta tecnología, ha desatado una tormenta de críticas más grande que cualquier otra que yo haya vivido antes”.
El estudio de Gao y Zhang concluye que “este resultado es más pronunciado para compañías que no habían implementado previamente políticas pro gay no discriminatorias, para compañías en estados con una gran población homosexual y para compañías de capital humano intensivo” y dicen que las evidencias “sugieren que los ENDA afectan la innovación, igualando a los empleadores, quienes son generalmente más creativos que los empleadores antigay, con las compañías innovadoras”.
“Existen correlaciones sustanciales entre las leyes inclusivas y la innovación, calculadas como los índices generales tanto para las patentes (.64) y las solicitudes de patentes (.86). Como promedio, las compañías en estados con ENDAs tenían un 8% más patentes y un 11% más citas de patentes, un indicador del impacto de estas que mide cuántas veces se ha hecho referencia a estas creaciones en otros procesos de innovación”, agrega Florida en CityLab.
De acuerdo con el artículo que firma Florida, este estudio “provee un análisis estadístico minucioso de los índices de las patentes de las compañías ubicadas en estados con algún tipo de legislación no discriminatoria referida al empleo (o ENDAs, por sus siglas en inglés), comparados con aquellos estados sin leyes de esta naturaleza. En suma, abarca cerca de 60,000 corporaciones públicas entre 1976 y 2008. Estas firmas registraron un promedio de 2,500 millones de dólares en activos y más de 9,000 empleados. El análisis lanza una mirada amplia a la situación en 20 estados que aplicaron esas leyes, un número que ha crecido desde entonces”.
“Aquí el estudio encuentra que las ENDAs ayudan a las empresas atrayendo más y mejores talentos. Aunque el ritmo de la circulación de talentos es discreto, el incremento en patentes y solicitudes se aprecia sustancialmente a través del tiempo, evidenciando los múltiples efectos de atraer más personal capacitado. Ya que, en forma creciente, la innovación proviene de grupos de investigación, esta ventaja se ve reforzada por tener más empleados talentosos trabajando juntos en proyectos altamente innovadores. (…) En resumen, las políticas gay-friendly, como se les conoce en inglés, fortalecen la innovación empresarial al ayudar a atraer mejor talento a los estados más abiertos y respetuosos”.
Pero Florida recuerda que hay limitaciones en estudios como este, que es que los resultados que encuentra también son generados por otros factores: “Por ejemplo, muchos estados con ENDAs, como son los casos de California y Massachusetts, están también entre los más innovadores [en sí mismos], por lo que quizá las compañías allí son solo más innovadoras per se, y sus niveles de innovación tienen poco o nada que ver con aquellos estados más genuinamente abiertos a los homosexuales”.
Y recuerda que la investigación de los economistas fue muy cuidadoso en excluir “factores que pudieran confundir los efectos de estas leyes no discriminatorias, tales como el rendimiento económico general y los niveles de capacidad de los estados, el tamaño de sus poblaciones LGBT, y su orientación política”.
“Además, la pesquisa repara en los efectos de leyes aprobadas antes contra otras aprobadas después e incluso compara estados que acogen las ENDAs con estados vecinos que no disponen de estas legislaciones, para así asegurarse de obtener el efecto preciso de la tolerancia en la innovación”.