Día a día los artistas y las mentes creativas que quieren vivir de su arte enfrentan constantes comentarios negativos o pesimistas. Seguramente han escuchado más de una vez: “Ser artista sólo te hará morir de hambre” y así muchos otras cosas desagradables que pueden hacer desistir de realizar sus sueños.
La pregunta clave es: ¿Cómo podré mantenerme siendo fotógrafo/pintor/músico/etc.? El detalle está en que sí se puede. Si no, ¿cómo lo habrían hecho los que hoy viven de eso?
Para ayudar a tomar la decisión de emprender a través de lo que apasiona, a continuación se desglosan cuatro recomendaciones para ayudar convertir el arte en un negocio que reportará mucho más que dinero:
Ignorar a los negativos: A esos que todo el día hablan sobre el probable fracaso del negocio y que en esta economía nadie querrá comprar cuadros, fotografías, etc. La verdad es que siempre habrá gente tratando de opacar y desanimar; no sólo en el área artística. Ya sea que lo hagan porque creen que están ayudando o porque están completamente celosos del talento y que estés persiguiendo sus sueños, sólo debe concentrarse en seguir adelante. Es bueno exigir respeto y si no hacen caso, suprimirlos del entorno real y virtual.
Encontrar el propio nicho: De la misma manera que lo haría con cualquier producto, el arte necesita su propia identidad. Se necesita ese algo que haga al artista conocido y lo convierta en el experto. Si el arte se basa en estampar elefantes azules en camisetas amarillas, hay que procurar ser el mejor estampador de elefantes azules en camisetas amarillas y así la gente acudirá al artista cuando quiera una. Una vez que sea reconocido por el nicho, se hará todo mucho más fácil diversificar en otros asuntos. Si aún está en una etapa temprana del descubrimiento de habilidades, es mejor jugar con diferentes opciones antes de delimitar el nicho.
No cambiar por el resto: Ya sea en el mundo del arte, la música, los negocios, los autos, todo el mundo tiene una opinión propia acerca de un producto. Nuevamente, deberá ser capaz de dejar de lado los comentarios negativos. En vez de aceptar la negatividad de quienes lo rodean, pregunte qué les gusta de la pieza tan “criticada” y qué harían ellos para mejorarla. No tenga miedo de hacerse escuchar y confie en sus instintos.
El B2B es un negocio real: Tomará el mismo esfuerzo vender a un solo individuo como a grandes negocios. La diferencia está en que los negocios tienen dinero suficiente, conexiones y recursos para financiar la pasión. Si lo suyo es el arte, entonces puede partir por diferentes galerías, consultores y diseñadores de interior. Haga una lista de las personas que pueden conocer en esas áreas e invítelos a tomarse un café.
Fuente: Artículo original publicado en Webonomía