El senador Mark Warner, presidente del Comité de Inteligencia del Senado, informó sobre cómo la inteligencia artificial facilita esta manipulación, advirtiendo que EE.UU. es ahora más vulnerable a interferencias globales que en 2020.
Rusia, China, Corea del Norte e Irán están utilizando deep fakes y desinformación avanzada para interferir en las elecciones de EE.UU.
Los latinos se encuentran entre las comunidades que son objetivo de estas operaciones.
En una rueda de prensa, el senador Mark Warner, presidente del Comité de Inteligencia del Senado, alertó que Estados Unidos enfrenta vulnerabilidades sin precedentes ante la interferencia extranjera en las próximas elecciones. Países como Rusia, China, Corea del Norte e Irán están utilizando tácticas de desinformación avanzadas, incluyendo deepfakes e inteligencia artificial (IA), para manipular la información dirigida a los votantes de EE.UU.
Según Warner, la amenaza ha crecido desde las elecciones de 2020 debido a los avances en manipulación digital que facilitan la diseminación de información falsa a bajo costo. “Creo que estamos más vulnerables a la interferencia en las elecciones globales que en 2020”, comentó el senador.
Además, subrayó que estos riesgos no solo están presentes antes del Día de las Elecciones, sino que “algunos de nuestros mayores puntos de vulnerabilidad serán en las horas y días posteriores a la elección, particularmente si los resultados son tan cerrados como se espera”.
Puntos clave del informe
1. Seguridad de la Infraestructura Electoral: Warner explicó que, pese a las amenazas, “la seguridad de nuestro sistema de votación y de nuestros funcionarios electorales es bastante buena”. Sin embargo, reconoció que muchos de estos funcionarios han sido objeto de amenazas y que ciertos estados podrían no estar plenamente apoyados por la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad (CISA).
2. Aumento de la Interferencia Extranjera: Warner enfatizó que países como Rusia, China e Irán han intensificado sus campañas de desinformación, usándolas como una herramienta económica y efectiva para desestabilizar el proceso electoral estadounidense. “Es fácil y barato para nuestros adversarios propagar información falsa y manipular a los votantes. Esto es más evidente ahora que en cualquier otra elección”, dijo Warner, añadiendo que muchos ciudadanos están “dispuestos a creer información que no tiene ninguna base real en hechos”.
3. Reducción de la Moderación de Contenidos en Redes Sociales: Warner expresó su preocupación porque las plataformas de redes sociales han reducido sus recursos de moderación, creando vacíos que los actores hostiles pueden explotar. “El ejemplo más extremo, claro, es X [antes conocido como Twitter], cuya moderación se ha reducido al punto en que su propio propietario promueve desinformación”, afirmó.
También señaló las dificultades con plataformas como TikTok, dada su relación con ByteDance y su conexión con el Partido Comunista de China, y mencionó que otras plataformas como Facebook, Instagram y YouTube también han recortado sus esfuerzos de moderación.
4. Uso de Tecnología de Deepfakes: Aunque las deepfakes aún no han alcanzado un nivel de manipulación electoral generalizada, Warner citó ejemplos recientes que demuestran la capacidad de la IA para manipular la percepción de figuras públicas. “Hace poco, el senador Cardin, presidente del Comité de Relaciones Exteriores, creyó que estaba hablando con un funcionario ucraniano. Resultó ser una deepfake”, indicó Warner, advirtiendo que este tipo de tecnología puede ser usada en contextos electorales.
Además mencionó un caso reciente en el que se intentó desacreditar a Tim Walz, candidato demócrata a la vicepresidencia, mediante una campaña de desinformación respaldada por Rusia. “Estoy presionando a la comunidad de inteligencia para que divulgue este tipo de información incluso más rápido, ya que los daños pueden ser significativos si se deja que estas historias circulen”, dijo.
5. Desinformación Dirigida Contra Comunidades Minoritarias: Warner expresó una profunda preocupación por las campañas de desinformación dirigidas específicamente a las comunidades latina y judía en EE.UU. “En 2016, Rusia se enfocó desproporcionadamente en la comunidad afroamericana. Este ciclo electoral, la desinformación se dirige especialmente hacia las comunidades latina y judía”, explicó. Warner resaltó que esta táctica busca erosionar la confianza en el proceso electoral entre los grupos vulnerables.
6. Posible Manipulación de IA en el Día de las Elecciones: Warner también advirtió sobre el riesgo de que las deepfakes puedan ser utilizadas para representar a funcionarios electorales “aparentemente destruyendo boletas el mismo día de las elecciones”.
Señaló que “estas naciones enemigas han encontrado que los engaños digitales son increíblemente efectivos para sembrar el caos y la desconfianza”. Adicionalmente, Warner mencionó que algunos actores como Rusia probablemente busquen socavar a la candidata demócrata, mientras que Irán puede estar más interesado en afectar a los candidatos republicanos.
Un comentario final de Warner
Al concluir el informe, Warner hizo un llamado a la cautela y responsabilidad en el consumo de información electoral en línea. “Si ven algo en internet que parece extraño, tómense un respiro y, por favor, no amplifiquen algo que pueda ser desinformación generada por un servicio extranjero”, recomendó Warner. “La mejor forma de defendernos es no permitir que estas campañas de desinformación se difundan sin cuestionamiento”.
En la sesión de preguntas y respuestas, Warner abordó si aliados como Israel y Ucrania están involucrados en esfuerzos similares de manipulación. Explicó que, si bien algunos aliados promueven visiones en apoyo a sus gobiernos, el nivel de manipulación y desinformación flagrante de Rusia e Irán es significativamente más agresivo.
Warner concluyó enfatizando la importancia de la alfabetización mediática entre los votantes. En un año electoral donde la manipulación digital ha alcanzado niveles de sofisticación nunca antes vistos, Warner subrayó que “la capacidad de los votantes para evaluar críticamente la información que encuentran será crucial para proteger la integridad del proceso electoral”.