Un movimiento de mujeres que ya cuenta con 2,039 militantes lanza 12 candidatas y seis candidatos aliados en Medellín a las elecciones regionales y locales de este 27 de octubre en Colombia, con la aspiración de obtener entre cinco y siete curules en el Concejo de la ciudad, la capital de Antioquía.
Se llama Estamos Listas y se postula con siete puntos programáticos: la defensa de los derechos humanos de las mujeres y de la promoción de su liderazgo en lo social, político, cultural y organizativo; la defensa de la vida y la seguridad en la ciudad; la propulsión de un pacto municipal para erradicar las violencias contra las mujeres; generar presupuestos municipales para reconocer los trabajos de cuidado que hacen las mujeres; una educación sexual y afectiva respetuosa desde las escuelas; el impulso de mecanismos de cuidado y protección a las niñas y niños con miras a que vivan libres de violencia; el derecho a vivir en “una ciudad bella, sostenible, saludable, equitativa, igualitaria y segura”.
Medellín es también considerada la capital del conservadurismo en Colombia. Esa percepción, recuerda El Espectador, quedó sellada con los resultados del plebiscito que buscaba refrendar el acuerdo de paz entre el gobierno de ese país y la guerrilla de las FARC. Si en Colombia la victoria del NO a ese acuerdo tuvo un margen ínfimo (50,23% frente al 49,76% del Sí) en Medellín la brecha fue exponencial: el No ganó con 62.97% en contra y el Sí, con 37.02%.
La revista Semana y El País coinciden en que fue ese resultado el semillero de lo que hoy quedó constituido como Estamos Listas, el movimiento de mujeres que compite al Concejo Municipal de Medellín este octubre.
Catalina Oquendo escribe para El País que el triunfo contundente del No en la ciudad hizo que este grupo de mujeres se movilizara para “recuperarse del miedo y la desazón”. La forma de hacerlo era “ocupar más espacios de poder de la vida política de la ciudad”.
“Y entonces nosotras dijimos que aquí teníamos que hacer algo, porque estábamos dormidas con la realidad de la ciudad, teníamos que proponer una agenda desde lo femenino para todas las personas, una agenda con una conciencia social. Somos un grupo de mujeres que hemos estado en organizaciones sociales y en la academia y que sentíamos que estábamos listas para incursionar en la política”, Piedad Toro, gerente de la campaña de Estamos Listas, le dijo a Semana.
Catalina Oquendo, por su parte, citó Dora Saldarriaga, cabeza de lista del movimiento, abogada y profesora: “Antes de salir a lo público estuvimos haciendo un trabajo interno, pensando la agenda, invitando mujeres. Era muy simpático porque les decíamos a las amigas: ‘Ve, ¿querés hacer parte de un movimiento político?. ¿Y quién es la candidata?. Ni idea. Nadie sabe, es colectivo”.
Estamos Listas está conformada por mujeres con diferentes contextos y oficios: amas de casa, estudiantes, trabajadoras de todo tipo, académicas. Hicieron red unas con las otras. Fueron creciendo desde 2017. Este año se oficializó el movimiento con 41,948 firmas ante la Registraduría.
Por ahora aspiran solo al Concejo y no a la alcaldía de la ciudad que ha logrado levantarse de la era de violencia a la que la sometió el hoy hollywoodizado Pablo Escobar, pero que todavía tiene mucho que arreglar, cambiar, sanar. Hasta marzo de este año, habían asesinado a 15 mujeres en la ciudad, un 36% más que el mismo periodo del año anterior; solo en el mes de julio ocurrieron 10 feminicidios .
La elección de las candidatas y candidatos de la lista cerrada, coinciden El País y Semana, la hicieron las 2039 militantes a través de internet, con el uso de aplicaciones y redes sociales.
Al principio, explica Catalina Oquendo en la nota de diario español, se postularon 39 candidatas de entre las militantes. Para hacerlo, debían presentar su currículum y grabar un video, explicando por qué tenían esta aspiración. No podían hacerse campaña.
Piedad Toro explicó a Semana: “Nuestra principal virtud en la campaña ha sido lo colectivo. Ninguna de nuestras candidatas tiene que tener plata ni experiencia, solo estar preparadas, y esto lo decidimos porque si vemos cómo funcionan las candidaturas de los hombres, pues son personas que un día despiertan con ganas de ser concejales y lo logran porque heredan los votos de algún familiar. La experiencia la tenemos todas, y aquí solo pesa lo colectivo. Supongamos que sacamos tres concejalas, ninguna tiene que poner plata; la plata la ponemos todas, cada una de nosotras aporta dinero y así somos como una gran colecta que está en servicio del movimiento”.
Los hombres, recuerda Toro, son aliados que, además, ayudan a que Estamos Listas cumpla con la cuota de género prevista por ley en Colombia.
El emblema principal de Estamos Listas es un pañuelo con “una búha” con las alas abiertas, “vigilante”, dicen ellas, con los colores morado, símbolo de la lucha de las mujeres, y amarillo, de guayacán de Medellín.
Está en todo el marketing del movimiento, cuyos productos en venta son una de sus fuentes de financiamiento. Las otras son las donaciones de entre uno a diez millones de pesos (entre unos $292 a unos $2,925) que pueden hacer cualquier ciudadano o ciudadana; microcréditos que pueden recibir de cualquier persona de 1 millón de pesos ($292); bonos solidarios en venta de entre 5,000 y 90,000 pesos ($1,46 a $26,33); y actividades culturales del colectivo.
Foto: Twitter @Estamos_Listas