El Premio Nobel de la Paz de 2006, Muhammad Yunus, consideró importante el rol que deben jugar los ciudadanos y sus ideas innovadoras para complementar la labor del Gobierno en la lucha contra la pobreza.
En una entrevista con Colombia.inn, agencia operada por Efe, el economista bengalí, quien visitó la semana pasada Bogotá, destacó igualmente la necesidad de que los negocios sociales y los tecnológicos se complementen para impulsar el desarrollo de un país.
“La tecnología tiene un rol muy importante, pero también es más el rol de los ciudadanos de ser innovadores y traer ideas“, apuntó Yunus, al ser consultado sobre el papel del emprendimiento basado en la tecnología frente a su planteamiento de negocios sociales.
Opinó que tiene que haber una “combinación” entre el emprendimiento tecnológico y las iniciativas sociales y que el Gobierno “tiene que tener un rol de facilitador” para alcanzar esta combinación al remover “cualquier barrera legal” que pueda obstaculizar el desarrollo de estas iniciativas.
“Como por ejemplo incrementar la banda ancha y brindar conectividad a zonas remotas a un bajo costo o sin costo, pero que estos servicios sean disponibles para la población y así cuando surja una idea creativa ésta puede ser realizada y llevada por esta misma conectividad que hayan implementado para tener negocios sociales en educación, en salud y en otras áreas”, sostuvo.
Yunus consideró “muy importantes” las políticas y programas gubernamentales para atender la pobreza, pero insistió en que “el rol tiene que ser de los ciudadanos”.
“Ellos (los ciudadanos) tienen que ser muy activos, porque el Gobierno solo no puede resolver los problemas. El Gobierno da dinero para caridad, pero esto no es suficiente para erradicar la pobreza”, agregó.
Indicó que los ciudadanos deben acompañar a hacer “una realidad” iniciativas como la entrega de microcréditos para los sectores menos favorecidos y pidió al Gobierno que se diseñe “un marco legal para que estas opciones” tengan éxito.
Propuso como otra oportunidad para los ciudadanos la creación de “negocios sociales”, que describió como “empresas para solucionar problemas”.
“Los ciudadanos se pueden motivar a realizar este tipo de empresas que pueden tener un gran impacto (…) para reducir la pobreza, para bajar los niveles de desempleo, para mejorar el medioambiente, entre otras cosas y el Gobierno tiene que tener un rol de apoyo”, puntualizó.
Posteriormente, al participar en el Foro “Estrategias innovadoras para aliviar la pobreza”, organizado por la revista Semana, Yunus habló de la experiencia del Banco Grameen o “banco de aldea” y cómo logró cambiar la vida de los habitantes de un localidad al otorgar créditos por pequeños montos.
“Hoy ese banco tiene 8,5 millones de clientes, casi todos son mujeres, 97% son mujeres. Ellos son los dueños del banco”, aseguró en su intervención.
Destacó que ese banco no es de su propiedad, ni del Gobierno sino de los que prestan el dinero, que, a su vez, otorgan créditos por 1,5 billones de dólares cada año.
Y aunque destacó la filantropía o la caridad para ayudar a los pobres, opinó que en estos casos la inversión “no retorna”.
“Uno puede crear un negocio social, de tal manera que la inversión retorne para hacer lo mismo nuevamente: el dinero sale, hace el trabajo y regresa nuevamente y lo mandamos nuevamente para que el mismo dinero pueda ser utilizado una vez más”, explicó.
Consideró, por otro lado, que sí es posible “crear un mundo donde no haya una sola persona que sea pobre” e indicó que “la pobreza no es de una persona, no es parte de él o de ella, es algo externamente impuesto”.
Para acabar con esta situación llamó a poner las “ideas en acción”. “Todo lo que tenemos que hacer es hacer algo pequeño y les recuerdo siempre piensen en grande”, acotó.
COLOMBIA.INN | @IQLatino