Yeny Carías, de 31 años de edad, profesora en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), es una de las ganadoras de los Innovadores menores de 35 en Centroamérica que reconoce la MIT Technology Review, con un software para sordos que los ayuda a seguir las clases en la universidad. Otro hondureño, Brayan Salazar, también ha sido premiado por su cargador eólico para móviles.
Aunque en mayo ya había logrado avanzar en su proyecto, unos ladrones entraron en su vivienda y robaron todos los dispositivos electrónicos con los que estaba preparando el software para sordos. Pero Carías retomó su tarea logró concluir en junio el primer prototipo de su sistema de captura y traducción de voz a lesho, la lengua de señas de Honduras.
Según la Federación Mundial de Sordos, acceder a un servicio de interpretación en lengua de señas no es sencillo para estas personas. Una encuesta efectuada en 93 países señaló que 31 de ellos no tenían ningún servicio de interpretación, mientras que 30 países tenían 20 o menos intérpretes cualificados.
El software para sordos creado por Carías pretende mitigar este problema, ya que funciona en la web como un intérprete virtual y podrá facilitar el aprendizaje a los 35,000 hondureños sordos o con problemas de audición. El sistema ideado por Carías convierte la voz captada por un micrófono en texto, y el texto en un avatar en tres dimensiones que realiza las señas del idioma lesho.
Esto permite que los alumnos sordos pueden ver en una pantalla el avatar y seguir la lección al mismo tiempo que sus compañeros. “El objetivo es reducir la enorme brecha comunicacional que tienen los estudiantes sordos al asimilar el idioma que usa el profesor, que repercute en su proceso de aprendizaje”, sostiene.
Este sistema ha sido diseñado para la universidad, pero no hace falta saber leer en español para poder entender las señas de lesho, por lo que podría servir también para niños que están comenzando su escolarización o para sordos que solo entienden señas.
Fuente: Reportaje publicado originalmente en El Heraldo | versión IQ Latino
Imagen: El Heraldo